Incluso y especialmente en habitaciones cerradas, estamos continuamente expuestos a contaminantes en el aire que causan asma, infecciones respiratorias, dolor de cabeza y/o fatiga.
Diferentes investigaciones han demostrado que el aire que respiramos en los interiores de los edificios puede estar hasta 100 veces más contaminado que el aire del exterior. Para reducir significativamente esta contaminación interior en casa o en el trabajo, debe garantizarse un suministro continuo y suficiente de aire limpio y, por lo tanto, libre de tóxicos y gérmenes.
Los purificadores de aire Blueair aseguran un aire limpio y sin contaminantes de manera continuada. Su funcionamiento es extremadamente silencioso gracias a que el aire puede pasar fácilmente por los filtros de los purificadores Blueair, el ventilador no necesita funcionar con excesiva potencia y, por lo tanto, se elimina buena parte del ruido generado por purificadores de aire de otras marcas. El silencio es una prioridad en los purificadores Blueair, por lo que incluso la carcasa de los purificadores están hechas de acero que absorbe el sonido en lugar de plástico, material que aumenta y facilita la proyección del ruido. El acero con el que están hechas las carcasas asegura además una larga vida a los purificadores.
Bajo consumo de energía: los dispositivos Blueair se encuentran entre los primeros purificadores de aire en recibir el sello de aprobación Energy Star, un certificado otorgado por la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU. (EPA) en cooperación con el Departamento de Energía de EE. UU. La eficiencia energética de todos los modelos Blueair supera los requisitos mínimos para obtener el certificado Energy Star.
Diseño sueco galardonado
Por su diseño moderno, atractivo y actual de sus purificadores de aire, Blueair fue galardonada con uno de los premios de diseño más codiciados de Escandinavia, el Premio al Diseño Sueco Excelente.
Cero emisiones de ozono
Los purificadores de aire que funcionan con iones negativos, como los Blueair, pueden generar ozono. Eso no ocurre con los purificadores de Blueair, ya que funcionan con un voltaje eléctrico muy bajo para reducir al mínimo la formación de ozono. Además, la cámara de ionización está ubicada en una carcasa de acero sellada para que no se escape el ozono. Los tests en los purificadores de Blueair han demostrado que la concentración de ozono en el aire purificado es incluso más baja que en el aire no purificado. Para certificarlo, los purificadores Blueair están certificados por el California Air Resources Board, organismo perteneciente al gobierno de California. Este certificado confirma que los purificadores de aire que lo reciben emiten menos de 0,050 ppm (partes por millón) de ozono.
Uso sencillo e intuitivo y fácil mantenimiento
A su estética moderna y actual, a los purificadores de Blueair se les debe sumar una forma de uso intuitiva y muy sencilla que permite que puedan ser usados por cualquiera. Solo hay que conectarlos a la red eléctrica y escoger la potencia deseada, o incluso, si el purificador dispone de sensores de aire, no será necesario ya que el propio aparato escogerá la potencia necesaria dependiendo de la cantidad de contaminantes presentes en el aire.
El cambio de los filtros de todos los Blueair se hace de manera rápida y extremadamente sencilla y no es necesario ningún mantenimiento. La carcasa y las rejillas se pueden limpiar fácilmente con paño húmedo o con un paño de microfibra para eliminar el polvo que se pueda haber acumulado.
Mejor tecnología, más rendimiento
Gracias a la gran potencia de los purificadores de aire Blueair, estos tienen la capacidad de purificar el aire más rápido que otros fabricantes. Su CADR (Tasa de entrega de aire limpio) es excepcional y ha sido confirmada por la Asociación de Fabricantes de Electrodomésticos (AHAM) en los Estados Unidos. Esta asociación evalúa la cantidad de aire purificador que entregan los purificadores de aire, asegurándose así que eliminación de los contaminantes del aire como gérmenes, humo, polvo o el polen, entre otros.
Cuanto mayor sea el valor del CADR, más rápido limpiará el aire el dispositivo. Para calcular el CADR se tiene en cuenta:
• El tamaño de las partículas eliminadas
• Qué porcentaje de partículas se eliminan
• Qué volumen de aire pasa realmente a través del sistema. Es decir, si dos purificadores de aire eliminan partículas del mismo tamaño y tienen la misma capacidad de filtrado, lo que ocurre con bastante frecuencia, el sistema más eficiente se puede determinar utilizando los valores CADR. Para garantizar la precisión e imparcialidad de los resultados, las pruebas CADR las realiza exclusivamente la asociación AHAM, que es una asociación industrial independiente. Los resultados de las pruebas CADR son reconocidos como correctos e independientes por la Agencia Estadounidense de Protección Ambiental (EPA).
El volumen de aire a menudo se denomina tasa de intercambio de aire,
es decir, la frecuencia con la que se filtra todo el volumen de aire de una habitación en un cierto período de tiempo, por ejemplo: se filtra el aire de una habitación de 10 m2 2 veces por hora. Algunos fabricantes ofrecen la tasa de intercambio de aire en lugar de los valores CADR, pero esto no es lo mismo: los valores CADR brindan información mucho más precisa sobre el rendimiento real de un purificador de aire.
La serie 600 de Blueair, por ejemplo, tiene el mejor CADR de la industria de purificadores de aire. Su superioridad se consigue gracias a la tecnología HEPA-Silent ™, una combinación de las mejores tecnologías de filtración electrostática y mecánica. Gracias a esta combinación revolucionaria de medios filtrantes sofisticados y una cámara de ionización sellada, los purificadores de aire Blueair logran mejores resultados que las tecnologías mecánicas o electrostáticas que funcionan por separado. Incluso en el purificador más pequeño de Blueair, la tecnología de filtrado HEPA-Silent ™ elimina el 99,97% de todas las partículas con un tamaño mínimo de 0,1 micras.
Cómo funcionan los purificadores de aire Blueair:
1. El aire se canaliza hacia el purificador Blueair con la ayuda de un ventilador ultra silencioso.
2. Las partículas del aire pasan a través de una cámara de ionización, donde se cargan eléctricamente. Debido a esta carga, se adhieren fácilmente a los exclusivos filtros para partículas hechos de polipropileno.
3. Las partículas cargadas quedan retenidas en el filtro progresivo con su superficie de estructura gradual. Las primeras capas recogen partículas más gruesas como polvo y polen. En las capas de filtro más profundas, se detienen incluso las partículas más pequeñas, como las humo y los gases procedentes de los coches.
La combinación de la cámara de ionización cerrada junto con los filtros de estructura gradual de Blueair forman la tecnología patentada HEPA-Silent ™, que garantiza la máxima purificación de aire con el mínimo nivel de ruido.
Filtros progresivos con una estructura gradual
Los filtros Blueair podrían describirse como “muchos filtros en uno” porque tienen una estructura con millones de fibras ultrafinas en diferentes tamaños y capas. Gracias a esta estructura de filtro propia de Blueair, las partículas se capturan en varias fases. En las primeras capas se eliminan partículas más grandes como el polen y el polvo, mientras que las partículas más pequeñas, como gérmenes y partículas de humo, se adhieren a las siguientes capas de filtro. Una vez que las partículas quedan atrapadas, ya no se liberan de nuevo al aire de la estancia, incluso si el filtro está demasiado lleno.
Gracias a su estructura única, los filtros no se obstruyen con el uso, por lo que los purificadores pueden proporcionar un rendimiento óptimo con el máximo flujo de aire posible durante toda la vida útil del filtro. Es recomendable cambiar los filtros aproximadamente cada seis meses. Esto se puede hacer de forma rápida y sencilla, ya que no son necesarios tornillos, ganchos ni herramientas. El cambio completo de los filtros de los purificadores Blueair se puede realizar en menos de un minuto y este es el único mantenimiento que necesitan estos purificadores.
